1 abr 2010

Carolina Herrera

Ha explorado su lado más artístico, obteniendo un estilo más barroco de lo que le es frecuente, con combinaciones de tejidos y el embellecimiento de estos sin perder ni un ápice de la elegancia de lujosos vestidos con pinceladas de color sobre fondos de metales fundidos que ya utilizó en la pasada colección, flores bordadas, marcos dorados, paillettes y pieles, característica en la marca neoyorquina.

Su refinamiento y elegancia, no se han visto subestimadas pese a las innovaciones.

En cuanto a patrones, mangas abullonadas y arrugadas, cortes asimétricos, estilos muy lady-like y vestidos cóctel. Pantalones de talle alto emparejados con blusas blancas.